viernes, 8 de febrero de 2013

Tengo la costumbre de sentirme un estorbo para el mundo, y para mi misma. De perderme en mis propios pensamientos y objetivos, y usarlos como excusa de mis fracasos. Tengo la mala manía de escribir solo en los momentos mas oscuros. También de repetir una y otra vez lo mismo, o parecido, uno tras otro tras otro tras otro. Tengo esa inseguridad oculta siempre conmigo, aunque intente convencer al resto y hasta a mi misma de que ya no existe. Tengo esa cualidad no tan maravillosa de ver a través de todo, hasta de lo mas engañoso y abstracto. Tengo ese no se que de querer darle vida hasta a lo más inútil, y encontrarle su encanto. Tengo imágenes sin sentido queriendo transformarse en algo convincente, y siguen sin lograrlo. Tengo melodías atrapadas en mi subconsciente, con ganas de explotar en miles de emociones que ni yo conozco. Tengo enjaulada esa necesidad de abrirme al mundo, y que vean de lo que yo misma me estoy perdiendo. También le tengo ese injusto miedo al futuro, y esa preocupación de que el mio no refleje lo que en verdad estoy buscando. Tengo esa impotencia de querer hacer miles de cosas, y terminar sin poder concretar ni una sola. Tengo bloqueos infinitos, que me hacen sentir sin ninguna utilidad. Tengo más miedos que seguridades, pero por suerte más sonrisas que llantos. Tengo esa intriga del "que será", y de que si yo podré ser capas de lograrlo algún día.

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